Día 1 de mayo de 2008.
A las 8 quedamos en el restaurante El Pinar. Salida hacia Eslida. Senderistas: María Jesús y Dioni, Salva, Carmen D, Mary, Susana y Pedro. Aparcamos junto al cementerio y seguimos el recorrido que Simón nos indica en su página
A las 8 quedamos en el restaurante El Pinar. Salida hacia Eslida. Senderistas: María Jesús y Dioni, Salva, Carmen D, Mary, Susana y Pedro. Aparcamos junto al cementerio y seguimos el recorrido que Simón nos indica en su página
http://www.andar.definpascual.com/
Iniciar por pista a la izquierda del cementerio (marcas del GR-36) durante 1.5 km. Llegamos a señalización de fuentes (Figuera, Fonillet, Escalotes) que quedan al margen –en todo el recorrido no hay ni un solo hilo de agua- Seguimos por el barranco de l’Oret que sube por camino de herradura con las marcas del GR hasta el collado de Barres (750 m y a 3 km del inicio). Abandonamos el GR y seguimos por la izquierda, por senda bien trazada (recién marcada) hasta una bifurcación de sendas, tomamos la de la izquierda que nos llevará a l’Aljub cuyas antenas son bien visibles 
(al volver cogeremos la otra senda para ir cresteando hasta el Bellota). L’Alt de l’Aljub está a 948 m y a 5.4 km del inicio. Allí almorzamos junto a dos ciclistas exhaustos (Mary llevó el café). Retrocedemos hasta la bifurcación de sendas, tomamos la que habíamos dejado a la derecha al subir y llegaremos a tres flechas de madera con el PRV-63.6 que sube de Chóvar y la indicación a Peña Blanca. Seguimos cresteando hasta una bifurcación de sendas (no coger una que baja). Tomamos la de la izquierda y a 0.6 km encontramos la cumbre de El Bellota (959 m y a 8 km del inicio) con una fita de piedras y un cuaderno de registro. Allí coincidimos con los hermanos Zaragozá de Meliana. Regresamos hasta la última bifurcación de sendas y cogemos la de la izquierda según el sentido de la marcha; tras una fuerte bajada y sin dejar el PRV-63.6 no plantamos en Peñas Blancas (975 m y llevamo ya 10 km) (hay una varilla de hierro suelta como indicación de su centro geodésico). La vuelta (quedan 6 km) es por el mismo camino recorrido desde la primera bifurcación que nos llevaba a L’Aljub, pero ahora al llegar ahí torcemos a la izquierda para seguir hasta el Collado de Barres con poste indicador de todas las direcciones. Un poco más abajo se puede volver a Eslida por el barranco (fuerte bajada y alternativa recomendada) o por la pista forestal –no es directa, hay que ir corrigiendo la marcha y tiene muchos bucles y revueltas para salvar el inmenso desnivel del barranco; tiene el inconveniente de unos 3 ó 4 km más y de que entramos en Eslida por la carretera de Aín, por lo que hasta el cementerio queda aún un buen camino, es la alternativa no muy feliz que seguimos Mary, Susana y yo. Cuesta casi una hora más ir por la pista que volver por el barranco. Paramos a tomar el bocata de la comida en una zona recreativa (pero sin una fuente) que hay a la salida de Eslida. Café en La Pinada y despedida.
Iniciar por pista a la izquierda del cementerio (marcas del GR-36) durante 1.5 km. Llegamos a señalización de fuentes (Figuera, Fonillet, Escalotes) que quedan al margen –en todo el recorrido no hay ni un solo hilo de agua- Seguimos por el barranco de l’Oret que sube por camino de herradura con las marcas del GR hasta el collado de Barres (750 m y a 3 km del inicio). Abandonamos el GR y seguimos por la izquierda, por senda bien trazada (recién marcada) hasta una bifurcación de sendas, tomamos la de la izquierda que nos llevará a l’Aljub cuyas antenas son bien visibles 
(al volver cogeremos la otra senda para ir cresteando hasta el Bellota). L’Alt de l’Aljub está a 948 m y a 5.4 km del inicio. Allí almorzamos junto a dos ciclistas exhaustos (Mary llevó el café). Retrocedemos hasta la bifurcación de sendas, tomamos la que habíamos dejado a la derecha al subir y llegaremos a tres flechas de madera con el PRV-63.6 que sube de Chóvar y la indicación a Peña Blanca. Seguimos cresteando hasta una bifurcación de sendas (no coger una que baja). Tomamos la de la izquierda y a 0.6 km encontramos la cumbre de El Bellota (959 m y a 8 km del inicio) con una fita de piedras y un cuaderno de registro. Allí coincidimos con los hermanos Zaragozá de Meliana. Regresamos hasta la última bifurcación de sendas y cogemos la de la izquierda según el sentido de la marcha; tras una fuerte bajada y sin dejar el PRV-63.6 no plantamos en Peñas Blancas (975 m y llevamo ya 10 km) (hay una varilla de hierro suelta como indicación de su centro geodésico). La vuelta (quedan 6 km) es por el mismo camino recorrido desde la primera bifurcación que nos llevaba a L’Aljub, pero ahora al llegar ahí torcemos a la izquierda para seguir hasta el Collado de Barres con poste indicador de todas las direcciones. Un poco más abajo se puede volver a Eslida por el barranco (fuerte bajada y alternativa recomendada) o por la pista forestal –no es directa, hay que ir corrigiendo la marcha y tiene muchos bucles y revueltas para salvar el inmenso desnivel del barranco; tiene el inconveniente de unos 3 ó 4 km más y de que entramos en Eslida por la carretera de Aín, por lo que hasta el cementerio queda aún un buen camino, es la alternativa no muy feliz que seguimos Mary, Susana y yo. Cuesta casi una hora más ir por la pista que volver por el barranco. Paramos a tomar el bocata de la comida en una zona recreativa (pero sin una fuente) que hay a la salida de Eslida. Café en La Pinada y despedida.
